Lo que más le gusta a Mario, además de estar con su familia, es dibujar; así que le pedimos que para la sesión de estudio trajera sus pinturas, sus dibujos favoritos y disfrutara haciéndolo. Tanto como lo hicimos nosotros con él y con los ojazos de su hermana.
Lo que no sabíamos era que la camiseta interior era "la buena", la que llevaría el día de su primera comunión, y le dejamos que se manchara. Con el consiguiente ataque de risa que nos dió a todos al enterarnos, menos mal que hasta su madre se lo tomó con humor...
La segunda parte del reportaje la planteamos como una tarde en familia, distendida, en el rio. Creemos que el resultado es el que esperábamos todos: unas imagenes bonitas para el recuerdo, pero sobre todo, un bonito recuerdo para ellos. Le dijimos a Mario que se tomara su tiempo, pero que queriamos un dibujo suyo en el que salieramos nosotros. Nos lo trajo y nos encantó. Lo tenemos en nuestro estudio en un lugar de preferencia.
Un encanto de familia...